Si eres gamer, sabes que un simple apagón o microcorte puede arruinar una partida, dañar tu PC o perder tu progreso.
Un SAI (Sistema de Alimentación Ininterrumpida) para gaming es la mejor forma de proteger tu equipo, tu inversión y tu experiencia de juego.
Por lo general, existen tres tecnologías a la hora de escoger un SAI: offline, line-interactive y online. Entra en nuestro comparador de SAI y descubre cuál necesitas.
¿Por qué necesitas un SAI para tu equipo gaming?
Los ordenadores gaming consumen más energía y son más sensibles a las variaciones eléctricas. Con un SAI, podrás:
Mantener tu PC encendido durante apagones breves.
Evitar daños en componentes como la gráfica, la fuente o el monitor.
Guardar la partida o apagar el sistema con seguridad.
Estabilizar la corriente para un rendimiento constante.
Para un PC gaming, se recomienda un SAI de entre 900 VA y 1500 VA, según la potencia de tu fuente y periféricos.
Puedes calcular fácilmente la potencia necesaria sumando el consumo total de tu torre, monitor y accesorios.
Para elegir bien, ten en cuenta tres factores:
Dependiendo de tu setup, puedes elegir entre varios tipos de SAI:
SAI interactivo: ideal para setups medios o gamers ocasionales.
SAI online doble conversión: recomendado para jugadores exigentes, streamers o PC de alto rendimiento.
SAI modular o profesional: pensado para estudios de streaming o setups con varios equipos.
Line-Interactive (AVR): corrige variaciones de tensión, eficiente y silencioso, ideal para oficina.
Online (doble conversión): salida siempre estable, recomendado si tienes equipos muy sensibles o red con perturbaciones frecuentes.
Aprende más: Tipos de SAI
Piensa en cerrar aplicaciones, guardar y apagar con calma. Para un puesto de oficina, 10–15 minutos suelen ser suficientes.
Si trabajas con hojas de cálculo grandes o renders, elige 15–20 minutos.
Para cortes frecuentes, prioriza baterías reemplazables y software de apagado automático.
Herramienta útil: Calculadora de VA y minutos
Guía técnica: Convertir VA a W y factor de potencia
Puertos y software: verifica USB/RS-232 para apagado automático del PC.
Regletas y protección: conecta solo los equipos críticos al respaldo de batería; periféricos no críticos al solo supresión si aplica.
Ruido y tamaño: para open space, prioriza bajo nivel sonoro y formato torre compacto.
Mantenimiento: revisa estado de baterías (cada 2–4 años, según uso) y ejecuta autotest mensual.
¿Qué es un SAI para gaming?
Los equipos gaming consumen mucha energía y son sensibles a las variaciones eléctricas. Un SAI evita que un corte repentino dañe tu tarjeta gráfica, disco duro o fuente de alimentación, y mantiene tu sesión de juego estable, sin reinicios inesperados.
¿Cuánta autonomía tiene un SAI para gaming?
Depende de la potencia del modelo y del consumo de tu setup. Normalmente, un SAI de 1000–1500 VA ofrece entre 5 y 15 minutos de autonomía, suficiente para guardar tu progreso o apagar correctamente el equipo.
¿Qué tipo de SAI es mejor para un PC gamer?
SAI interactivo → ideal para setups medios o gamers casuales.
SAI online de doble conversión → perfecto para equipos potentes, streamers o competiciones.
Este último ofrece la mejor estabilidad eléctrica y protección continua.
¿Puedo conectar mi monitor y consola al mismo SAI?
Sí, siempre que la potencia total no supere la capacidad del SAI. De hecho, conectar monitor, torre y router al mismo dispositivo ayuda a mantener la conexión y visibilidad durante un corte eléctrico.
¿Qué pasa cuando se va la luz?
El SAI detecta el corte instantáneamente y cambia al modo batería sin que tu PC se apague. Así evitas pérdida de datos, daños en componentes y reinicios inesperados.
¿Cómo sé qué potencia de SAI necesito?
Suma el consumo (en vatios) de tu torre, monitor y periféricos principales. Luego elige un SAI con un 30 % más de capacidad para garantizar margen de seguridad y autonomía.
¿Hace ruido?
Algunos modelos incluyen ventiladores, pero existen opciones silenciosas, ideales para streamers o setups en habitaciones pequeñas.
¿Dónde colocarlo?
Debe situarse en un lugar ventilado, estable y sin humedad, cerca del enchufe principal y del PC. Evita cubrirlo o apoyarlo directamente sobre la torre.